A través del traductor Abraham Jiang, ministro líder de la
Iglesia Shanghai Logos, en Shanghai, en una entrevista con Ebony Small; Heng
explicó en su juventud había sufrido una rara condición médica que lo dejó
paralizado hasta 1979.
Hasta ese año, Heng dijo, no tener esperanzas y pasar por
tiempos donde deseaba quitarse la vida. Él dijo que había rogado a Dios ayuda,
y Dios le mandó un predicador que le presentó a Jesús.El predicador le dijo a Heng
que: “Jesús era el Hijo de Dios y murió por nuestros pecados, más tres días
después resucitó,” y que si recibía a Jesús, sería perdonado y podría ser
sanado, y entrar al cielo.
“No estaba muy interesado en el perdón, todo lo que me preocupaba era mi salud,” el predicador instruyó al desesperado Heng a orar y ayunar por siete días y “en el séptimo día, El Señor me sanó,” declaró Heng. “Me levanté y caminé.”
El milagro impresionó a mi familia , inmediatamente
empezaron a alabar a Jesús y a arrepentirse, casi como una escena sacada del
libro de Hechos de los Apóstoles. Expresó “La familia entera vio esto y
sólo se inclinaron para orar y recibir al Señor como su salvador personal,”
Un mes después, la familia de Heng tuvo una fiesta de
agradecimiento en su casa e invitaron a todos sus amigos y al predicador que
les habló acerca de Dios. “El predicador compartió el Evangelio con ellos,
y yo les hablé de todo lo que Jesús había hecho en mi vida. Mas de 50 personas
vinieron a la fe cristiana. Empezamos una iglesia esa misma noche,” dijo Heng.
Los siguientes ocho años, el grupo creció hasta ser un
movimiento que abrió 200 iglesias, las cuales albergaron mas de 20,000
convertidos. Contó Heng. “Empezamos un programa nacional,
enviando gente a diferentes provincias a predicar,”
Más allá del éxito, el movimiento cristiano en China sufrió
ataques significativos de parte de las autoridades chinas.“Muchos de los
ministros fueron encarcelados. Yo fui perseguido por más de cinco años y estuve
preso por tres años. Le pregunté a Dios porqué tenía que estar en prisión. El
Señor me dijo: ‘hay necesidad del Evangelio en este lugar’. Así que, aún en la
cárcel muchos abrazaron la fe, siendo bautizados en los baños de la prisión,”
dijo Heng.
A pesar de la persecución de la Iglesia en China, el
cristianismo ha explotado, sobrevivido y avivado bajo el régimen comunista. “Según
mis cálculos, China esta destinada a convertirse en el mayor país cristiano del
mundo muy pronto,” dice
el autor chino, Fengnang Yang. Quien es un experto en religión en China, estima
que para 2025 China tendrá 160 millones de cristianos. Esta estimación
sobrepasa Estados Unidos, que reportó en 2010, un total de 159 millones de
protestantes.
Fuente: www.bibliatodo.com
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