Bienvenidos a zona juvenil

la mejor música juvenil de tu preferencia lo escuchas aquí..

domingo, 18 de noviembre de 2018

10 Consejos Para Jóvenes Cristianos - Reflexión


Tal vez no hay una época de más cambios y crecimiento que nuestros años jóvenes. Estamos estudiando, tal vez jugando deportes, o incluso aprendiendo cómo tocar un instrumento o hacer otra actividad. Mientras que nuestro crecimiento en estas áreas es importante, los jóvenes también deben procurar crecer en su madurez espiritual y relación con Dios. Teniendo esta meta en mente, quisiera compartir 10 consejos generales para todo joven.
1. Gózate en la gracia de Cristo.
Antes de pensar sobre cómo vivir, es de primera importancia el recordar la grandeza de la gracia que Cristo ha manifestado en tu vida. Si no te recuerdas del amor que Jesús tiene por ti, se te hará fácil no amar a los demás. Así que antes de pensar en lo que has de hacer para Cristo, piensa en lo que el Hijo de Dios ha hecho por ti (Gá. 2:20). De esta forma la obediencia a Jesús te resultará más fácil y gozosa.
2. Devora la Biblia.
Cada cristiano —no solo los jóvenes— se debe alimentar de la Palabra de Dios como si fuera un niño hambriento. No digas “amén” a nada que no esté estipulado en las Sagradas Escrituras. No le hagas caso a ninguna voz que se levante contra la revelación del Altísimo. Lee la Biblia de día y de noche. Construye tu vida sobre la roca de la Palabra. Después de todo, Dios honrará a aquellos que honran Su Palabra (1 Sa. 2:30).
3. Ora, ora, ora.
Sintoniza tu corazón para que siempre esté en comunión con el Padre. Incluso cuando no estés en la iglesia ni en tu cuarto, ora al Señor en todo momento. Mientras estás lavando los platos, alaba al Señor. Mientras vas caminado por la calle, glorifica a Dios. Aprovecha cada instante para meditar en Él y dirigir tu alma hacia el único Soberano (1 Te. 5:17).
4. Guarda tu pureza sexual.
Recuerda que eres templo del Espíritu Santo. Tu cuerpo no te pertenece. Como nos dice el precioso Catecismo de Heidelberg: “Yo, con cuerpo y alma, tanto en la vida como en la muerte, no me pertenezco a mí mismo, sino a mi fiel Salvador Jesucristo”. Tus miembros no son tuyos. Tus ojos no son tuyos. Pertenecen a Dios, a Cristo, y al Espíritu. Por lo tanto, aléjate de cualquier cosa que pudiese alejarte de Dios. Guarda tu virginidad para la gloria del Señor para poder entregársela alegremente a tu cónyuge en la noche de tu boda (Heb. 13:4).
5. Usa tus dones para servir en tu iglesia local.
Dios te ha dotado de dones y talentos. Por consiguiente, úsalos todos para la gloria de Su nombre. Ya verás cómo Él abrirá puertas para que los pongas por obra. En vez de esperar a que todos te sirvan a ti, toma la iniciativa y empieza a servir a otros en tu iglesia local. Ponte a la disposición del pastor y dile: “Pastor, cuente conmigo para lo que sea. Quiero ser de bendición para mis hermanos y hermanas en la fe”. Ayuda en todo lo que puedas. Aprende a gozarte con los que se gozan y a llorar con los que lloran. Así los hermanos verán el amor de Cristo manifestándose a través de tu vida (Gá. 5:13).
6. Estudia la sana doctrina.
Lee libros edificantes. Pasa tiempo con otros hermanos que toman las cosas de Dios con seriedad. Hazles caso. Aprende de ellos. ¿Por qué no comenzar a leer un libro todos juntos y luego comentar sus opiniones al respecto? ¿Algo como Doctrina bíblica de Wayne Grudem o La soberanía de Dios de A.W. Pink u otros autores sanos tales como John Piper, John MacArthur, Paul Washer, R.C. Sproul, Charles Spurgeon, Martyn Lloyd-Jones, Sugel Michelén, Miguel Núñez, etc.? Apasiónate por los cinco pilares de la Reforma protestante: Sola Scriptura, Sola gratia, Sola fide, Solus Christus y Soli Deo gloria. Pide a Dios que selle estas gloriosas verdades en tu espíritu (Tito 2:1).
7. Trabaja como máquina.
No seas perezoso. La Biblia nos anima a no ser perezosos, sino imitadores de los que mediante la fe y la paciencia heredan las promesas (Heb. 6:12). ¡Esfuérzate! Sé el mejor trabajador que puedas. Trabaja como José en Egipto y Daniel en Babilonia. Cuando tu jefe te pide que hagas algo, hazlo con todas tus fuerzas. Cuando vas al trabajo, recuerda que tu ética de trabajo es una forma maravillosa de alabar al Señor. Adora al Señor por medio de tu trabajo. Dios se gozará porque estás dando un buen testimonio de Su Hijo. Obedece a tu jefe y haz más de lo que te pide (Mt. 5:41).
8. Sé humilde.
Hace un par de meses le hice una entrevista a Miguel Núñez y me dijo: “El joven es muy orgulloso, cree que lo sabe todo y cree que lo puede todo”. Por lo tanto, es muy importante ser humilde y dócil. Aunque seas más inteligente o tengas más dones o más carisma que otros en tu iglesia local, ¡no te creas! “Porque el que se cree ser algo, no siendo nada, a sí mismo se engaña” (Gá. 6:3). Humíllate. Aprende de los ancianos en tu iglesia. Son más sabios, más experimentados y más maduros que tú. No te creas la última Coca Cola del desierto. No eres imprescindible. Dios puede avanzar su Reino sin ti. Pídele al Señor constantemente que te mantenga humilde (Isa. 66:2).
9. Madura pronto.
En palabras de Jairo Namnún: “De ser posible, madura tan temprano como puedas. Trabaja tan temprano como puedas, cásate tan temprano como puedas, sirve en tu iglesia tan temprano como puedas. No hay sentido ni propósito en atrasar la adultez o vejez. Ni la adolescencia ni la juventud son excusas para poder vivir nuestras vidas para Dios”. Así que madura pronto. Sé un adulto. Deja de comportarte como un niño. El Señor no quiere que seas el payaso de tu iglesia. Sé sobrio (1 Co. 16:13).
10. Recuerda el evangelio.

No olvides que cualquier buen consejo es imposible de seguir sin el poder del evangelio obrando en ti. Recuerda siempre de donde yace tu identidad: no en tus obras, ni en tu estatus, sino en la persona y obra de Jesucristo. Procura siempre conocer a Cristo, y a este crucificado (1 Co 2:2), y deja que el evangelio sea el lente por el cual entiendes las Escrituras, tu ministerio, y tu vida.
Fuente. ministeriomahanaim.cl

Recupera Tu Pasión Por Dios - Reflexión




Dios nos manda a que lo amemos completamente, no sólo dice que un poco, sino de todo corazón, con un amor sincero, con una completa pasión. Con toda tu mente, que lo reconozcas y lo ames por quien él es: nuestro Salvador, el Dios Todopoderoso.
Con todas tus fuerzas, que lo ames a él y al servicio que le ofreces, que le demuestres que lo amas con acciones y no palabras. Con toda tu alma, con un amor completo y una entrega total. Amarlo con el alma es solo un complemento de todo lo demás, en otras palabras es entregarle todo a Dios.
Enamorarse de Jesús es algo tan asombroso porque no es un amor en el que sufres, no te preocupas en que si Dios te seguirá amando o te fallare algún día, como tal vez lo haces con las demás personas.

Todo aquel que confiese que Jesús es el Hijo de Dios, Dios permanece en él, y él en Dios. Y nosotros hemos conocido y creído el amor que Dios tiene para con nosotros. Dios es amor; y el que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él (1 Juan 4: 15-16)

Estos versículos nos dicen que cuando dependemos y creemos en el amor de Dios, tenemos una unidad o una comunión con él. ¿Pero qué pasa cuando ese amor o esa pasión por el ya no existe más o nunca existió?

¿Cómo poder encender tu pasión por Jesús?

Para poder entender la respuesta a estas preguntas, primero debemos entender porque es importante mantener la pasión hacia Dios.
Tener una completa pasión por Dios significa que estás dispuesto para servir a Jesús sin importar tu situación o las consecuencias. El tener esa pasión por servir a Dios, por desarrollar tu ministerio, tiene mucho que ver con tu propósito. Tu propósito es el trabajo para el cual Dios te ha creado. Si no lo conoces entonces esa pasión no puede existir. Pero, al conocerlo entonces puedes cumplir tu misión en la Tierra porque sabes que tienes que hacer, porque esa pasión te conduce a cumplirla. Un ejemplo de una persona apasionada que conocía su propósito fue Jesús. En 2 Reyes 9-10 habla sobre lo que él hizo. Dios, al ungirlo como rey de Israel, no perdió su tiempo, sino que sabía lo que tenía que hacer: acabar con los cultos de Baal y el reinado de Jezabel. Muchos le tenían miedo y no querían enfrentarse a ella. Pero la pasión de Jesús por servir a Dios no le permitió que se rindiera. Acabo matando a Jezabel, sus hijos y a los sacerdotes de Baal, terminando con todo ese periodo de maldad y caos, cumpliendo su propósito.

El vivir apasionados por Dios es muy importante porque al hacerlo estas reconociéndolo. Lo reconoces al hacer tu trabajo, orando, alabándolo y no solo en eso sino que también en todo lo que haces, y lo haces todo como para él. Esto te hace sentir bien. Te sientes bendecido y crees que puedes hacer mucho porque tienes a Jesús. Como si estuvieras en el mejor momento en tu vida espiritual.

La pasión desata bendiciones y provoca el goza de Dios en tu vida porque obedeces a Dios y lo pones a el primero, es lo que te anima a seguir adelante porque estás viéndolo a él delante de ti. No te interesa tanto tu propio bienestar como el de los demás. Por causa de esto alabar y adorar a Dios no se vuelve un problema porque te enfocas más en el que en ti, igual con las personas, primero ellas y luego tú. El vivir apasionados nos trae muchas recompensas, como ya dije, desata muchas bendiciones, porque Dios sabe cuando haces algo de corazón. También, es importante porque cuando no vives apasionado por Dios, buscas tu propio bienestar, te vuelves egoísta y no sientes esa misma compasión hacia las personas.

Hay muchas formas que pueden destruir tu pasión

Primero, está el engaño. Juan 10:10 afirma que el primer objetivo de Satanás es destruir nuestra pasión, porque sin ella no se puede servir a Dios de todo. Juan 8:44 declara que Satanás es el padre de la mentira, así que el engaño debe ser su principal arma de destrucción ya que el engaño es la mentira disfrazada de verdad. Cuando descubrimos que hemos sido engañados, nos llega una gran decepción hacia la persona que nos daño, y muchas veces es difícil recuperarse de una decepción porque pierdes confianza por la persona. En esto también están incluidas las mentiras como: Dios no me ama, nadie me saluda, todos me ignoran, etc. Estas son grandes mentiras que el Enemigo nos hace creer, que nos apartan de la comunión que tenemos con las personas y con Dios, destruyendo nuestra pasión por esa separación.
Segundo, es el miedo. En Mateo 25: 14-30 habla sobre la parábola de los talentos, donde uno de los tres hombres prefirió esconder el talento que recibió porque tenía miedo, a causa de esto le fue quitado su único talento y dado a otro. Muchas veces Dios les da dones a las personas, pero al ejercerlos les da miedo por ya sea perturbaciones, problemas, etc. Entonces, esto destruye tu pasión porque no estás trabajando tu ministerio.


Tercero, es la rutina. Algo se vuelve una rutina cuando lo haces todos los días. Hay rutinas que son buenas y otras malas. Hábitos que en lugar de ayudarte te destruyen. Esto en muchas ocasiones causa estrés, fatiga, aburrimiento, tensión, etc. Eso destruye tu pasión porque cuando todo esto empieza a invadir tu vida, empuja tu pasión fuera, se acaba y comienzas a hacer todo por obligación y no por pasión. Lo haces solo porque tienes y no porque quieres.
Sabiendo esto, es necesario conocer que es lo que enciende esa pasión por Dios. Una de ellas es volver a entender de donde viene nuestra salvación. De recordar el sacrificio de Jesús en la cruz y la razón por la cual lo hizo.
El entender tu propósito en la Tierra también encenderá tu pasión por Dios. Para encontrarlo, debes de ir y preguntarle a Él, porque qué mejor es preguntarle al inventor sobre su invención que a otra persona, esto significa que al buscarlo, deja de enfocarte en ti y más en tu Dios, tu creador.
Otra manera de encender tu pasión, es amando a Dios y a su obra. Aunque al principio te parezca esto muy difícil, amar algo o alguien cuando en realidad no es cierto, y hacerlo como una obligación más que como un anhelo, pero al acercarte a Él y conocerlo mejor lo amaras cada vez más, aunque al principio no sea así. Para conseguir esto es necesario que pongas mucho de tu parte. No te rindas solo porque ya no sientes nada, sino que sigue luchando, porque tu Dios espera esto de ti.

No es buena idea dejar de leer la Biblia o dejar de orar, ya que esto solo te alejara de Dios. Es muy difícil hacer esto cuando no hay pasión, pero al luchar, Dios pondrá su espíritu sobre ti y según lo que dice Hechos 1:8, que recibirás poder del Espíritu Santo para vencer cualquier cosa en el nombre de Jesucristo, y que seréis testigos de los milagros y del poder del Dios Todopoderoso.

Además, cuando te acercas a Dios, recibirás su Espíritu Santo y el te dará lo que necesitas en tu vida, esto incluye el amor. Así que, te invito a que sigas buscando de Dios ya que es la única manera en la cual podrás encender tu pasión por el. Dios los bendiga.

Autor: Viridiana Hernández

Qué Es Lo Que Sientes, Amor O Ilusión?

Resultado de imagen para corazones

María, estoy enamorado de ti, te amo y deseo estar contigo ¿Me aceptas?

- Voy a pensarlo - le responde María a Juan- después te daré la respuesta.
Esta es la manera como muchos jóvenes llegan a declararse a una señorita. ¿Alguna vez te has declarado así?.

Hoy en día, dos jóvenes del sexo opuesto se conocen y con tan solo dos o tres veces de haberse visto ya están aceptando tener una relación, engañándose que lo que existe entre ellos es amor, cuando en realidad es solo una ilusión.

No se puede amar a alguien sin conocerlo, y para conocerlo no es necesario tener una relación de enamorados, ya que para eso existe la amistad, que es la etapa en la cual dos personas pueden darse cuenta de como es el otro, su forma de ser, de pensar, de actuar, etc. Por lo tanto, no existe el amor a primera vista, puede haber atracción a primera vista pero no amor, y la atracción hará que empieces a ilusionarte, pero eso no es amor.

Si una señorita le responde a un joven que recién ha conocido y se le ha declarado “¿Porqué me amas?”, lo va a dejar mudo. Lo único que quizás diga es “Porque eres bonita y me gustas”. Pero eso quiere decir que no amarás a alguien que no te gusta y eso es absurdo.

¿Por qué es importante saber si lo que sientes por alguien es amor o ilusión?. Porque esto te ayudará a evitar muchas “aventuritas”, ya que la ilusión es pasajera, pero el amor permanece, “El amor nunca deja de ser” (1 Corintios 13:8). Estas aventuras malogran nuestro testimonio como cristianos y en vez de ser luz, seremos tinieblas. Así que antes de declararte a una señorita o aceptar a un joven es necesario que te preguntes “¿Es amor o ilusión lo que siento?”.

El joven cristiano es diferente al joven no cristiano. ¿Qué concepto tendrías de un joven o Srta. que a cada rato cambia de pareja?¿Agrada esto a Dios?. La Biblia nos dice “Consérvate puro” (1 Timoteo 5:22b). Si a un joven no le interesa su testimonio en este aspecto, está muy claro que no ha nacido de nuevo, no ama a Dios y solo busca su satisfacción personal. Los jóvenes cristianos ya no vivimos para nosotros sino para Jesús nuestro Señor y Salvador y nuestra conducta no depende de conceptos “ridículos” que tengamos, sino de la Palabra de Dios que es la luz que alumbra nuestro camino para llevarnos por el sendero del bien y la felicidad.



Los jóvenes cristianos no debemos ser apresurados ni debemos dejarnos llevar por la ilusión. Puede ser que el amor comience con una ilusión, pero en muchos casos puedes ilusionarte de alguien que sabes que no está en la voluntad de Dios. El joven cristiano sabe esperar en Dios el tiempo necesario y la pareja adecuada. Así que si aún no tienes pareja no te sientas mal, ni menos que los que ya la tienen. Aunque digan que ya “te estas pasando” siéntete feliz y bendecido porque estas esperando la voluntad de Dios en vez de burlarte de alguien o hacerte mal a ti mismo(a) al estar con alguien que no amas. Hoy día existen miles de casos en los cuales la pareja en vez de hacerte feliz, al pasarle la ilusión, te hace la vida imposible. Por lo tanto, lo mejor en la vida no es tener pareja, sino el hacer la voluntad de Dios. Cristo Jesús dijo: “Bienaventurados los que oyen la Palabra de Dios y la hacen” (Lucas 11:28). Al joven que sepa esperar, Dios lo premiará con una pareja que sea de bendición en su vida espiritual y no de tropiezo, que sea ayuda idónea y no ”demonia”.

María no aceptó a Juan y, después de una semana, él ya estaba declarándose a otra chica. ¿Dónde esta el amor que dijo tenerle?. Esto sucede muy frecuentemente. Señorita que amas a Dios: no consientas en aceptar rápidamente a un joven que te declara su “amor”. Dios está muy interesado en nuestra vida sentimental y en proporcionarte la pareja que verdaderamente te pueda hacer feliz. Los jóvenes mayormente quieren estar con una chica por su belleza o por su cuerpo pero no por amor.

Los jóvenes cristianos nunca debemos intentar tener una relación sentimental sin antes tener una profunda comunión personal con Dios. Lo que hagamos dejando al Señor de lado no será voluntad de El, sino nuestra. Cuando llega el momento de elegir es imprescindible comenzar por la oración, buscando la guía del Señor y permitiendo que El sea la base de la futura relación.

¿CUÁL ES LA DIFERENCIA ENTRE AMOR E ILUSIÓN?

1) La ilusión se basa en lo físico “¡Que bella es!”. Busca tener una bella pareja para poder jactarse. El amor mira el aspecto interior de la persona, su forma de ser. “El amor no es jactancioso, no se envanece” (1 Corintios 13:4).

2) La ilusión desaparece al obtener lo conseguido, el amor permanece al paso de los años. “El amor nunca deja de ser” (1 Corintios 13:8)

3) La ilusión busca obtener provecho, se pregunta ¿qué puedo conseguir de esta relación: dinero, posición, etc.?. En cambio el amor busca dar. El amor se pregunta ¿Cómo puedo hacer feliz a mi pareja? porque “El amor no busca lo suyo” (1 Corintios 13:5). Dios nos mostró que nos ama al dar a su Hijo Jesucristo para nuestra salvación (San Juan 3:16)

4) La ilusión busca placer: “Dame la prueba de tu amor”. El amor sabe respetar y esperar hasta el matrimonio, porque “El amor todo lo espera” (1 Corintios 13:7)

5) La ilusión tiene un efecto negativo en ti: dejas de estudiar, de obedecer a tus padres, de congregar, de orar. La ilusión te conduce a una vida impura. El Amor produce en ti deseos de superación en todo por el bien y el futuro de la relación que llevan, porque “el amor no hace nada indebido” (1 Corintios 13:5)

6) La ilusión te lleva a estar molesto muchos días con tu pareja sin hablarle. El amor te lleva a perdonar y ser comprensivo en el mismo día que es cometida la ofensa, porque “El amor no se irrita, no guarda rencor” (1 Corintios 13:5)

Finalmente joven cristiano, sepamos que el ceder a una ilusión fuera de la voluntad de Dios, puede destruir nuestra vida espiritual, y el Ministerio que el Señor nos haya encomendado, volviendo nuestra vida cristiana infructuosa. Si vivimos haciendo la voluntad de Dios, el te mostrará si lo que sientes es Amor o ilusión.


Autor: Victor Zafra

¿Por Qué Se Enfrían Los Matrimonios?



El enfriamiento en la relación matrimonial ocurre fundamentalmente por falta de atención!

Los matrimonios que no alimentan la relación emocional corren el riesgo de enfriarse. Dios nos creó como seres espirituales, pero también emocionales y también físicos.

La relación emocional en un Matrimonio es muy necesaria. Significa darse atención mutua, compartir momentos especiales juntos, salir de vez en cuando como pareja, hacer planes para estar juntos, etc.

Una de las primeras y más importantes recomendaciones que le hacemos a los matrimonios que vienen a nuestra oficina, es que dediquen una noche a la semana, preferiblemente los Viernes, para hacer una “cita” con su cónyuge.

En esta cita, deben tratarse como novios. Este hábito hace que la pareja vuelva en alguna medida, a vivir la emoción del noviazgo y eso trae gozo a la relación.

Todos los matrimonios pasamos por circunstancias difíciles, unas más que otras; y eso es inevitable. Pero si alimentamos la relación con una cita a la semana y con otras interacciones positivas, los aspectos negativos van a tener menor influencia y vamos a poder superar cualquier conflicto más fácilmente.

Varones, debemos ser más románticos con nuestras esposas. Para ellas, el romance no acaba nunca. Cuando una esposa no percibe de su esposo una actitud romántica con ella, entonces no se siente amada y frecuentemente piensa que su esposo tiene interés en otra persona.

Tenemos que reconocer que por lo general la relación se enfría por causa del hombre, ya que es él el que tiene que ser el pro-activo de la relación, el que marca la iniciativa. Así fuimos diseñados. Una esposa que recibe atención romántica de su esposo, atención y un trato amoroso, va a funcionar muy bien como mujer ayuda idónea, compañera, amante y todas sus funciones de esposa.

Varones, no dejen que se enfrié la relación con su esposa. Mantenga su atención sobre ella, dígale palabras bonitas siempre, manifiéstele un cariño y un cuidado especial. Saque una noche a la semana para hacer una cita romántica con ella, aunque sea a caminar alrededor de su barrio o ciudad y comer un helado. Al menos una vez al año saquen un fin de semana para compartir juntos como pareja. Busquen quien les cuide sus niños de vez en cuando, para que ustedes puedan cuidar su matrimonio.

Tu matrimonio y tu familia es el tesoro más valioso que Dios te ha dado. CUÍDALO!

Por: Luis Y Hannya Fernandez